tendencias primavera verano

MARINEROS

volviendo a verano azul el estilo marinero tomará las calles, la mezcla de rayas y lunares darán un toque mágico que, combinado con el color blanco, símbolo de la pureza, y el azul marino, como toque de color, crearán una elegancia con aire francés.

ÁFRICA SALVAJE

África, tierra soñada por muchos, nos trae los colores lisos como el tostado, beige y camel, combinado con short, bermudas y blusas, la gran estrella de la primavera, el azul, nos muestra la moda más salvaje .

CALUROSO VERANO

El sol calienta y sube poco a poco por nuestro cuerpo calentando los colores que predominaban en primavera, el azul, transformándolos en verdes cálidos y rosas sin punto intermedio que destacan del palo al rosa fuerte que exalta la belleza y el moreno de esta estación.

El naranja irá entrando con los rayos del sol y el pálido rosa se convertirá en malva y fucsia que permiten dar naturaleza y expresión a nuestra cara.

NEGRO ELEGANTE

No debemos de pasar por alto el color fetiche de muchos diseñadores, el negro, eternamente elegante, extremo y sexy.

MAQUILLAJE: MIRADA INTENSA Y LABIOS SHINE

los años 60 viene pisando fuerte, la mirada embrujadora acapara l centro de atención, los tonos caqui, logrados con un brillante toque audaz de color, en este caso, un flash de color amarillo brillante sobre el color negro que alumbrará la mirada nocturna. Si lo que queremos es usarlo para el día a día simplemente sustituiremos el amarillo usando sombra mate en un tono gris oscuro en los párpados movibles, y luego difuminarla aplicando sombra blanca hacia las cejas. No olvidaremos el rimel pues afianza la mirada haciéndola más penetratante e intensa.
Los labios se cubrirán de rosa y tonos pasteles como base y el toque brillante que harán una sonrisa dulce y natural para la mañana dejando paso al rojo pasión y bermellón que trasformaran los labios en una inspiración al deseo y la sensualidad.
el toque final pero no menos importante, lo daremos con el colorete, se impondrá el rosa pastel durante la mañana, oscureciéndolo según pasan las horas marcándolo fuerte al llegar la noche.